El Encuentro Glorioso llena Zaragoza de alegría y esperanza en el fin de la Semana Santa

Encuentro Glorioso
photo_camera Con el Domingo de Resurrección se pone fin a la Semana Santa 2023. Foto: Laura Trives

El ambiente seguía siendo serio y solemne, el andar, pausado y el silencio, roto por el leve repiquetear de los tambores y el sonar de los bombos y timbales. Pero hoy se respiraba algo diferente en la plaza del Justicia de Zaragoza. No era solo el olor del incienso, era algo intangible: la esperanza. Y es que hoy, Domingo de Resurrección, en el sentir y en el corazón de cofrades y devotos solo había lugar para unas palabras: "¿Por qué buscáis entre los muertos al que vive?". De la iglesia de San Cayetano, los cofrades de la Real Hermandad del Cristo Resucitado y de Santa María de la Esperanza y del Consuelo salían puntuales a las 11.15 horas con el rostro serio y los ojos llenos de alegría. Una alegría que ha sido mayor, casi apoteósica, cuando el paso de la Virgen de la Esperanza ha salido de la iglesia y todo se ha llenado de un estruendo que no era más que fervor y gozo desmedidos.

Este Domingo de Resurrección era un día especial, pues significa el triunfo de Cristo sobre la muerte. Era especial también porque los cofrades salían de la iglesia de San Cayetano con el tercerol al hombro, el rostro descubierto y la mirada al frente. Algunos la alzaban hacia el cielo quizás recordando a aquellos que ya no están y a los que se recordaba con la cruz "In Memoriam" o sintiéndose dichosos por vivir, un año más, otro emocionante Domingo de Resurrección. El público, no demasiado numeroso en la plaza del Justicia, guardaba absoluto silencio y había quien se enjugaba las lágrimas incapaz de contener la emoción. Otros reconocían que la piel se les erizaba y los más pequeños tan solo trataban de marcar el ritmo de los bombos con los pies y de imitar a los cofrades con su propio instrumento en miniatura.