Íñigo Royo, el héroe oscense detrás del primer trasplante pulmonar completamente robótico del mundo

Un aragonés está detrás del primer trasplante pulmonar completamente robotizado del mundo
photo_camera Un aragonés está detrás del primer trasplante pulmonar completamente robotizado del mundo

El hospital Vall d´Hebron de Barcelona ha realizado con éxito el primer trasplante pulmonar completamente robótico del mundo con una nueva vía de acceso. En esta exitosa hazaña, los aragoneses han aportado su pequeño granito de arena gracias al doctor Íñigo Royo que ha sido partícipe en este hito histórico para la medicina. Royo, que actualmente trabaja en el hospital Migue Servet y en el Clínico, lo cierto es que no solo ha participado sino que ha ido uno de los “cerebros” en llevar a cabo esta operación. Fue precisamente él quién tuvo la idea de crear una nueva vía de acceso con una incisión de apenas 8 cm en lugar de una apertura de 30 cm para separa costillas y tórax como se hacía hasta ese momento.

A sus 45 años, este médico originario de Huesca se incorporó en 2021 al servicio de Cirugía Torácica del Hospital Vall d´Hebrón. Esta oferta la aceptó porque siempre le había apasionado el tema de los trasplantes de pulmón y era una oportunidad única en su carrera ya que se trata del hospital de referencia que más procedimientos de este tipo lleva a cabo en toda Europa.

La primera semilla para haber logrado este histórico hecho la pusieron en Estados Unidos, concretamente en el Hospital Cedars-Sinai Los Ángeles, que hace ya un año anunciaron el primer trasplante pulmonar robotizado pero en este caso, todavía seguían necesitando hacer incisiones laterales para quitar el pulmón y sustituirlo por el nuevo.

Gracias a este avance, comenzaron a estudiar el año pasado una fórmula que redujese la agresividad de esta intervención quirúrgica. Normalmente, se hacen dos incisiones como poco y a veces se abre el esternón aunque con ello seguías teniendo que poner unos separadores para abrir las costillas, por lo que el riesgo y la agresividad de cara a los pacientes era muy alta. Íñigo Royo tuvo entonces la brillante idea de utiliza el xifoides como vía de acceso y de esta forma, la incisión que habría que realizar sería mucho más pequeña, sin la necesidad de abril las costillas y el esternón. Toda esto se puso en práctica con éxito el 28 de febrero.

El cirujano se siente, como no puede ser de otra manera, muy orgulloso de su hazaña y de haber supuesto todo un avance para este tipo de pacientes, aunque no sea una técnica que se vaya a utilizar en todo el mundo por el momento. Se trata de un hito médico con multitud de beneficios ya que, entre otras cosas, la recuperación de los recién operados es mucho más rápida que cuando se trata de un método convencional. Ahora ha vuelto a su tierra, Aragón, concretamente al servicio de Cirugía Torácica del Servet aunque, por el momento, no ve prioritario implantar esta técnica en este hospital, si que van a ser clave sus conocimientos y su experiencia a la hora de la implementación de la cirugía robótica.

ÍÑIGO ROYO

Licenciado en Medicina por la Universidad de Zaragoza, cuenta con un Máster de Dirección Médica y Gestión Clínica de la Universidad nacional de Educación a Distancia. Es doctorado cum laude gracias a su tesis “Evaluación económica de la lobectomía pulmonar por cirugía videotoracoscópica en Aragón”. Cuenta además con un Máster en Gestión y Planificación Sanitaria otorgado por la Universidad Europea y la Sociedad Española de Directivos de Salud.