Aterrizó en Zaragoza hace unos días dispuesto a descubrirla y, ya de paso, comprobar en sus propias carnes si su calor «infernal» en pleno agosto era para tanto. Tuvo suerte, pues le recibió un cierzo refrescante que le hizo pasar algo de frío en la sombra. «Es impresionante la cantidad de aire que hace en esta provincia», reconocía el tiktoker argentino Román Socías (conocido como Romancito por los lares de las redes sociales) mientras el sonido del viento se colaba en un vídeo en el que contaba a sus más de 400.000 seguidores en TikTok y 100.000 de Instagram que el reloj solar más grande del mundo estaba en Zaragoza, concretamente en Vadorrey. En ese video también hacía saltar las alarmas de que el reloj, considerado uno de los más precisos del mundo, estaba mal pues él grababa el vídeo a las 15.35 y el reloj marcaba la 13.35. «Romancito, según el UTC en España es +2 en verano, por lo que el reloj va puntual..», le corregía uno de sus seguidores. Misterio resuelto.
Emulando al youtuber Yosoyplex, que enganchó a millones de seguidores con su vuelta al mundo en 80 días, el tiktoker argentino de 22 años hace lo propio pero por un territorio más reducido: España. Su misión es recorrer las 50 provincias (centrándose en las capitales) y las dos Ciudades Autónomas para «descubrir todos los tesoros que tienen para ofrecer». Y en esas está desde el pasado 3 de julio y en esas estará hasta dentro de año y medio o dos años cuando finalice su ambiciosa ruta. La primera fue Madrid, luego Barcelona y hace unos días estuvo en Zaragoza, donde se quedó «flipando» con el cariño de los «maños» (a los que al principio llamaba «minchos»), las frutas de Aragón y La Seo.
«Lo que más me llamó la atención de los zaragozanos es el cariño, la cercanía, el contacto físico. Yo soy argentino y allá no conocemos lo que es el espacio personal. Cuando estuve por Zaragoza noté que la gente era muy cercana, que estaban en contacto siempre unos con otros. Fue una de las cosas que más me gustó, de verdad, es gente muy agradable«, cuenta Román. A destacar también las «fruticas» de Aragón que, aunque al principio pensaba que no le iban a «gustar nada», le acabaron encantando y La Seo. «Si tuviera que quedarme con una cosa diría que esa catedral es impresionante, entré y no sabía lo que me esperaba porque como no se permite hacer fotografías en el interior no la había visto nunca. Realmente me encantó».
¿«Sabían que Zaragoza es la única ciudad del mundo que tiene dos catedrales activas»? Contaba Romancito a su legión de fans en uno de los vídeos en los que paseaba por la plaza del Pilar. Ellos contestaban casi de inmediato: «Es que Zaragoza es una preciosidad», «Aquí una maña orgullosa» y algunas que otras recomendaciones turísticas llenaban las publicaciones de su estancia en la ciudad, algunas con más de 30.000 visualizaciones.
El argentino estuvo solo unos cuantos días pero le dio tiempo a disfrutar de un paseo por el Ebro («fue de mis cosas favoritas, los paisajes de la ribera eran preciosos») a montarse en el caballito de La Lonja («una de las experiencias más emocionantes») y a comprarse una medida de la Virgen del Pilar para lucirla orgulloso en su muñeca. Todavía a día de hoy, cuando ya ha pasado algo más de una semana de su viaje, el tiktoker cree que se estaría comiendo el adoquín que compró en una tienda típica.
«Lo del adoquín fue muy curioso porque pensaba que me iba a durar el caramelo toda la vida», cuenta entre risas admitiendo que no se compró el de mayor tamaño de la tienda. Sus seguidores del otro lado del charco también se sorprendieron con este dulce típico de Zaragoza: «Pagas 4 euros una vez pero te quedas lamiendo el resto de tu vida». Lo que también probó Romancito en su viaje fueron las borrajas (en forma de croqueta y acompañado del influencer Takoyakiblog) y el ternasco de Aragón. «Estaba exquisito».
Ataviado con un cachirulo que le costó un poco poner, el tiktoker probó también las piedras del río, se sumergió en Caesaraugusta «y en los impresionantes restos romanos» y volvió a Barcelona pensando en su siguiente paso por Zaragoza, pues le quedaron muchas cosas por ver. Y dicho y hecho. Esta semana Román regresará para ver «todo el tema de la Expo 2008, el Palacio de la Aljafería, La Lonja, Puerto Venecia, algún museo…». Después, partirá a otra aragonesa, Teruel, y entonces ya solo le quedarán 46 provincias de España por descubrir.