La Guardia Civil ha detenido a dos hombres, autores de un atraco en Zaragoza y dos en Navarra, con los que lograron sustraer un botín que asciende a 15.000 euros. Los detenidos, que ya han ingresado en prisión, entraban en las sucursales con un arma de fuego simulada con la que intimidaban a empleados y clientes para lograr el dinero. Una vez lo conseguían, encerraban a las víctimas en el baño.
La operación llamada “Black Mask” comenzó en junio del año pasado, cuando uno de los detenidos accedió a la sucursal bancaria de la localidad de Buñuel (Navarra). Esta persona intimidó al director y logró llevarse en una bolsa 5.400 euros. Antes de huir, el atracador encerró en el cuarto de baño a los tres trabajadores que se encontraban en el lugar en ese momento.
En el mes de octubre, se produjo un robo idéntico al anterior, pero esta vez en la localidad de Corella (Navarra). Un hombre accedía con el rostro tapado y arma corta a una entidad bancaria, encerrando a los testigos en el cuarto de baño antes de salir con los 6.000 euros del botín.
Los investigadores pudieron identificar a los autores, con antecedentes por hechos similares, gracias a varios testigos que los vieron huir en un vehículo y a las cámaras de seguridad.
Detención Planificada
En el último atraco que han llevado a cabo en Magallón (Zaragoza), los investigadores observaron cómo uno de ellos huía a gran velocidad en su vehículo. Con el apoyo de la Unidad de Seguridad Ciudadana (USECIC) de la Guardia Civil de Zaragoza, el dispositivo establecido concluyó con la detención de esta persona.
En el momento de la detención, el detenido portaba un arma corta de fuego simulada, un puñal de grandes dimensiones y una bolsa con 3.965 euros en su interior, coincidiendo con la cantidad exacta que había sustraído. Además, en el interior del vehículo los guardias civiles localizaron la indumentaria con la que el autor de los hechos accedió al interior de la sucursal para cometer los hechos, así como dos teléfonos móviles.
La visualización de cámaras de seguridad, así como el registro realizado en la vivienda del autor, han facilitado la segunda detención.
La investigación ha sido llevada a cabo por el Equipo de delitos contra el Patrimonio de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil en Navarra.
