Desarticulan en Calatayud una banda criminal que robó a más de cien mayores

La Policía Nacional ha desmantelado en Calatayud la cúpula de una organización criminal que se dedicaba a robar y estafar
La Policía Judicial de Calatayud les atribuye la autoría de más de cien delitos
photo_camera La Policía Judicial de Calatayud les atribuye la autoría de más de cien delitos

La Policía Nacional ha desmantelado en Calatayud la cúpula de una organización criminal que se dedicaba a robar y estafar a personas de avanzada edad. Se ha detenido a cinco personas de entre 22 y 52 años de edad como presuntos responsables de varios hurtos, estafas y un delito de pertenencia a grupo criminal.

Los hechos se remontan a mayo del año 2022, cuando una anciana denunció el robo de su bolso, donde tenía 3.000 euros que acababa de sacar del banco. Durante la investigación, los agentes descubrieron que se trataba de una banda itinerante que actuaba en numerosos puntos de España, por lo que lo más difícil era dar con ellos debido a este cambio continuo de localidad para delinquir.

Pero unos meses después, en septiembre, ese mismo grupo volvió a actuar en la capital bilbilitana. En esta ocasión seleccionaron a un hombre nonagenario como víctima y le sustrajeron dos libretas bancarias y le hicieron tres reintegros que superaban los 700 euros. Los dos hechos, pues, seguían el mismo modus operandi: el conocido en jerga policial como método de la siembra.

EL MÉTODO DE LA SIEMBRA

Los autores están especializados en desarrollar su actividad criminal mediante el método de la siembra. Para realizarlo es necesaria la participación de al menos tres personas, que estarán perfectamente coordinados y con una función específica cada uno de ellos. Suelen actuar en las inmediaciones de bancos a fin de localizar potenciales víctimas (especialmente muy vulnerables) que realicen importantes reintegros de dinero o para averiguar el PIN de sus tarjetas o libretas mientras realizan otra operación.

Posteriormente, una vez que la víctima elegida por ellos abandona el banco, los autores seleccionan la técnica más adecuada para materializar el hurto. Generalmente, uno de los ladrones finge un desmayo, otro pide ayuda a la víctima y un tercero se apodera del dinero o efectos, para a continuación volver al cajero y extraer el máximo dinero posible en efectivo.

Los hechos se cometen mayoritariamente en las inmediaciones de entidades bancarias, pero también suele ser habitual en grandes superficies comerciales.

Durante la investigación, los agentes descubrieron que se trataba de una banda itinerante que actuaba en numerosos puntos de España

REPARTO DE TAREAS

En el primer escalón se encuentra una de las detenidas, como la líder de la organización. Esta persona se encarga de elegir a los miembros que van a actuar en cada uno de los hechos. Debido a su amplia experiencia delictiva, es la encargada de materializar los robos de los sobres con dinero o tarjetas bancarias, tras lo cual, se lo pasa a otro miembro, normalmente el que estuvo vigilando para copiar el número PIN y así poder sustraer el dinero en efectivo de los cajeros.

En el segundo escalón está uno de los miembros más consolidados de la banda: el encargado de acceder a las entidades bancarias para la selección de la víctima, visualización del número PIN y ejecución de la maniobra de distracción.

En el tercer y último escalón se encuentra el resto de integrantes del grupo criminal, seleccionados en función de las necesidades y disponibilidad. Estas personas son las que efectúan labores de vigilancia, seguimiento, extracción del efectivo y aseguramiento de la huida.

GRUPO ITINERANTE

Según explica la Policía, normalmente se trata de grupos criminales sumamente activos y con una gran movilidad geográfica que se desplazan de manera nómada con el objeto de realizar sus actividades ilícitas como un auténtico modus vivendi.

Para estos desplazamientos suelen utilizar vehículos privados que suelen poner a nombre de terceras personas (habitualmente identidades robadas) con los que transportan a todo el grupo completo.

Esta banda actuó especialmente en Aragón, Cataluña, Valencia y Murcia. Suelen estar periodos muy cortos de tiempo en una localidad, donde se hacen con el botín y desaparecen, actuando tanto en el medio urbano como en el rural, dificultando así la labor de investigación de los agentes.

Con carácter general suelen elegir a personas especialmente vulnerables, bien sea por su avanzada edad o por una merma en sus condiciones psicofísicas para llevar a cabo rápidamente el robo sin ser detectados y poder huir del lugar sin que los integrantes del grupo sean relacionados entre sí.

MÁS DE CIEN DELITOS EN EL ÚLTIMO AÑO

Los detenidos, que sumaban casi 60 antecedentes policiales por hechos de la misma naturaleza, pasaron el día 10 de marzo a disposición judicial.

La Policía Judicial de Calatayud les atribuye la autoría de más de cien delitos cometidos en todo el territorio español durante este último año y de las denuncias recopiladas hasta el momento, el total de lo sustraído a diferentes víctimas ascendería a casi 60.000 euros.