Rescatados 18 montañistas y un perro durante la Semana Santa en el Pirineo aragonés

La mayoría de los accidentes se produjeron en zonas muy conocidas, como los ibones occidentales o la Maladeta
Dos de los rescates se produjeron en plena madrugada en Ezkaurre y Peña Forata
photo_camera Dos de los rescates se produjeron en plena madrugada en Ezkaurre y Peña Forata

Los agentes de la Guardia Civil de los distintos puestos distribuidos por todo el Pirineo aragonés han conseguido rescatar a un total de 18 montañistas desde el pasado jueves hasta este domingo. La mayoría de los accidentes se produjeron en zonas muy conocidas, como los ibones occidentales o el parque de Maladeta en Benasque.

El operativo se iniciaba el mismo jueves sobre las 12.30 horas, cuando varios especialistas del Greim tuvieron que acudir en ayuda de tres excursionistas diferentes que habían sufrido caídas y se habían dañado los tobillos y la rodilla. Una de ellas, una vecina de Barcelona de 62 años, fue rescatada en el ibón de Acherito, en Ansó, y pudo ser atendida en el hospital de Jaca. En el mismo centro acabó una zaragozana de 58 años, que en este caso se había resbalado mientras practicaba esquí de montaña en el barranco de Escalar, en Astún.

Los efectivos también tuvieron que acudir en ayuda de una mujer de 48 años, vecina de Zaragoza, que se había accidentado en el llamado camino del Cielo, que da la vuelta a los Mallos de Riglos. La montañista sufría una lesión en el tobillo y fue evacuada en un ciclo de grúa y, en este caso, fue llevada al hospital San Jorge de Huesca.

Una hora después, el 062 recibía una llamada comunicando que tres personas que recorrían la senda de la Besera a los ibones de Ip, en Canfranc, no sabían nada de uno de sus compañeros desde hacía dos horas, puesto que se había ido en busca de un perro extraviado. Los especialistas contactaron con el excursionista que había marchado en su búsqueda y gracias al localizador que portaba el animal pudieron alcanzar al can, que se encontraba en un terreno escarpado de fuerte pendiente con hielo y nieve, así como cortados rocosos hacia el fondo del barranco.

SIETE RESCATES DURANTE EL VIERNES

A lo largo de la jornada del viernes, la acción de los rescates se trasladó a la zona oriental del Pirineo y Prepirineo, entre el Sobrarbe, el Somontano y la Ribagorza. Dos de ellos ocurrieron en el término municipal de Benasque: allí, un hombre de 60 años y residente en Navarra tuvo que ser auxiliado tras sufrir un corte de digestión en la base del corredor de la Rimaya, hacia el pico de la Maladeta. Fue evacuado en helicóptero y pudo ser atendido en el centro de salud de la localidad ribagorzana.

Allí también, pocas horas después, un aviso procedente del refugio de la Renclusa informaba que una mujer de 48 años, vecina de Girona, había sufrido un accidente esquiando cuando descendía del Portillón Superior, hacia el refugio. La esquiadora se había lesionado la rodilla izquierda y no podía continuar descendiendo. Según informa el cuerpo, se le inmovilizó la rodilla izquierda mediante una férula de vacío y fue trasladada hasta la helisuperficie de Benasque.

Sobre las 14.25 horas, un escalador navarro que intentaba completar la vía de “No Tata Balis”, en la pared de Canelles de Estopiñán del Castillo, sufrió un accidente que le provocó dolor en ambos tobillos. Dicho accidente, según los médicos, pudo producirse al romperse una roca e impactar con ambos pies. Debido a que la zona era vertical, los especialistas usaron dos ciclos de grúa. Una vez en el acuartelamiento de Graus, el hombre fue recogido por una ambulancia y trasladado al hospital de Barbastro.

El entorno de Bierge, conocido por sus saltos de agua y relieve, fue también testigo de dos operaciones de rescate. Una de ellas ocurría cuando una mujer de 32 años, vecina de Navarra, sufría un accidente en el barranco de la Peonera. Al tener dolor en un pie, la montañista no podía continuar la marcha. El Greim de Huesca se acercó a la zona y pudo inmovilizarle la extremidad con un vendaje compresivo y férula, evacuándola finalmente al centro de salud de Abiego. Lo mismo le sucedió a un barcelonés de 61 años mientras descendía de la ermita del pueblo de Otín: una esguince en el tobillo le impedía avanzar, y tuvo que solicitar auxilio y ser trasladado al centro de Aínsa, en este caso.

Otros dos vecinos de Zaragoza, de 46 y 58 años, fueron rescatados por el Greim: uno de ellos se rompió la pierna en Yebra de Basa y acabó en el hospital de Jaca; el otro se perdió mientras descendía del pico Borón, en el término municipal de Loporzano, y finalmente fue encontrado en la zona de Vadiello.

OPERATIVO DE MEDIANOCHE

La central del 062 recibió, recién estrenado el sábado, un aviso a las 0.02 horas que informaba de que una cordada de escaladores había ido a hacer una vía en alta montaña en el pico Ezkaurre, en Ansó. Los propios montañistas manifestaron que se encontraban en la vía Esminu del pico, y no podían continuar.

Una vez localizado el grupo, el Greim de Jaca decidió hacer pequeñas trepadas para llegar hasta ellos. El terreno era bastante abrupto y con zonas que tenían nieve, así que debieron usar botas y piolets. Después de una hora, los escaladores, dos varones de 34 años de Madrid, fueron evacuados ilesos.

En la tarde del sábado, una mujer navarra de 54 años se cayó mientras esquiaba en las inmediaciones del pico Punta Ezcarra, en Canfranc, y sufrió molestias en la rodilla izquierda, así que tuvo que ser trasladada al hospital de Jaca.

CUATRO MONTAÑEROS ATRAPADOS LA PASADA MADRUGADA

Aproximadamente a las 2.50 horas de este domingo, el 062 recibe una llamada comunicando que cuatro montañeros habían quedado atrapados en la Peña Forata, en el término de Sallent de Gállego. Al lugar acude el Greim de Panticosa, que los ha podido localizar y los ha conducido hasta un lugar seguro para continuar por sus propios medios.