Detenida una pirómana en Calatayud tras quemar contenedores, coches y una vivienda

Coches y contenedores quemados
photo_camera La mujer aprovechaba los paseos con su mascota para originar los incendios

Agentes de la Policía Nacional detuvieron el pasado jueves 18 a una mujer de 31 años como presunta autora de varios delitos de incendio cometidos todos ellos en la localidad de Calatayud. De hecho, se le atribuyen un total de 18 contenedores calcinados y también una vivienda tras lanzar un objeto ardiendo por la ventana del inmueble.

Desde finales del año pasado, se tenía conocimiento de una oleada de incendios intencionados en contenedores y viviendas en la zona del casco urbano, por lo que el Grupo Operativo Local de Policía Judicial inició una investigación para averiguar la identidad del presunto responsable, así como de proceder a su detención.

El primero de los incendios tuvo lugar en el mes de diciembre del pasado año, en el que dos contenedores de la confluencia de las Calles Herrer y Marco y San Torcuato se calcinaron por completo y de forma simultánea y a tan solo 150 metros otro contenedor ardía de la misma forma.

Incendios de similares características se fueron produciendo de forma periódica, todos ellos en la zona del casco antiguo de la ciudad, saldándose con un total de 18 contenedores quemados, tres vehículos dañados, dos corrales abandonados afectados, el interior de una vivienda que quedo calcinada tras lanzarse a la misma un objeto incendiario desde la vía pública, así como un carrito de bebe que comenzó a arder dentro de un portal de un inmueble.

Tras una ardua labor de investigación y de realizar las gestiones pertinentes, los agentes lograron identificar a una mujer, conocida de sobra por haber sido detenida en numerosas ocasiones por delitos relacionados con el fuego, como la presunta autora de todos los hechos delictivos citados.

Tras establecer un dispositivo en torno al domicilio de esta persona, los actuantes procedieron a su detención en la mañana del pasado jueves, trasladándola posteriormente a dependencias policiales.

Cabe destacar que era tal el grado de sensación de impunidad que la mujer tenía, que en una de las ocasiones, fue ella misma la que alertó a los servicios de emergencia de que se estaba quemando un contenedor, intentado obtener con ello, al igual que los paseos con su perro, una coartada ante cualquier posible identificación en la zona por parte de los testigos.

La detenida que contaba con más de 10 antecedentes policiales, fue puesta a disposición judicial horas después, quedando en libertad con cargos tras ser oída en declaración.

El delito de incendio viene regulado en el artículo 351 del Código Penal, castigando con penas de prisión de diez a veinte años a los que provoquen un incendio que comporte peligro para la vida o integridad física de las personas.