Vivían en una casa «okupada», guardaban una moto robada en el garaje y tenían en el domicilio efectos sustraídos por valor de 60.000 euros. La Guardia Civil ha detenido a tres personas en Cadrete, dos hombres y una mujer de edades comprendidas entre 26 y 34 años, como presuntas autoras de varios delitos de robo con fuerza. Además, también se les imputa delito de usurpación de bien inmueble y defraudación de fluido eléctrico y consumo de agua.
La madrugada del pasado 9 de septiembre agentes de la Unidad de Seguridad Ciudadana de Comandancia (Usesic), que se encontraban prestando servicio por un polígono industrial de Cuarte de Huerva, identificaron un vehículo, ocupado por tres personas, que circulaba por dicho lugar. En la inspección del turismo se localizaron, en el interior del maletero, dos bombonas de acetileno y oxígeno comprimido (con sus correspondientes sopletes y apliques), además de diversas herramientas que habitualmente se utilizan para la comisión de hechos delictivos, como mazas de grandes dimensiones, linternas frontales, guantes, destornilladores, etc.
Tras verificar que los ocupantes no podían justificar la procedencia lícita del material hallado en el turismo la Guardia Civil procedió a su incautación para el estudio posterior del mismo ante la sospecha de que pudiese proceder de algún robo.
Durante la identificación de estas tres personas se comprobó que todos tenían antecedentes policiales y a uno de los varones, hasta cuatro requisitorias en vigor de búsqueda y detención, siendo dos de ellas por ingreso en prisión. Por todo ello, esta persona de 26 años fue detenida y trasladada a dependencias oficiales de Casablanca junto con el material intervenido en el vehículo.
Una vez en el acuartelamiento, los agentes de seguridad ciudadana observaron que dichos efectos podrían corresponderse con los sustraídos en una empresa de Cuarte de Huerva días antes, por lo que se pusieron en contacto con el responsable de la misma quien comunicó en ese momento que esa misma noche había sufrido un robo en sus instalaciones reconociendo los conjuntos de soplete de acetileno que habían sido intervenidos, dándose la circunstancia que eran similares a otros dos que fueron sustraídos en la comisión del primer robo en su empresa.
Continuando con la investigación la Guardia Civil inició las gestiones oportunas sobre los otros dos ocupantes del turismo identificado y del domicilio donde residían, todo ello ante la sospecha de que en dicho inmueble se hallara material procedente de otros ilícitos. Sospecha que se corroboró tras comprobar que los sospechosos residían en un bloque de viviendas deshabitado de Cadrete y que estarían residiendo de manera ilegal en dicho lugar, por lo que se realizó una inspección de las zonas comunes de dicho bloque y se localizó, en el garaje, un ciclomotor que había sido sustraído en la misma localidad días antes.
Además, en esa zona de aparcamiento, se habían instalado medidas de seguridad con la colocación de un madero de grandes dimensiones, que solo permitiría el acceso a estas personas y, que se habían cambiado los bombines de cerraduras de diversas zonas. En el portal de las viviendas se halló diverso material entre el que destacaban dos bombonas de acetileno idénticas a las localizadas en el vehículo de los sospechosos que, posteriormente, fueron reconocidas por el responsable de la instalación. Una vez en las escaleras se verificó que todas las viviendas del bloque se hallaban con puerta antiocupación.
Todas excepto una, que presentaba dicha puerta forzada y con la cerradura cambiada, resultando ser la vivienda donde residirían los sospechosos. El ascensor de este rellano se encontraba colgado en dicha planta y su puerta manipulada. Por tal motivo la Guardia Civil procedió a su apertura y localizó una gran cantidad de efectos en su interior, tratándose de material sustraído.
Acto seguido los agentes llamaron a la puerta del domicilio ocupado, del cual se escuchaban ruidos procedentes del interior y, tras varios minutos, se consiguió que los moradores abrieran la puerta, tratándose de las dos personas que estaban siendo investigadas, procediéndose en ese momento a su detención. Tras observar desde el exterior que dentro de la vivienda se hallaban multitud de efectos susceptibles de haber sido sustraídos, se solicitó una entrada y registro de dicho inmueble y, una vez llevado a cabo, se localizó numeroso material que fue intervenido para su análisis.
Como resultado del estudio sobre estos efectos se han conseguido esclarecer hasta el momento un total de ocho delitos de robo con fuerza en las cosas y otro de hurto. Todo ello tras reconocer los legítimos propietarios el material que les había sido sustraído y que se cometieron en las localidades de Cadrete, Cuarte de Huerva, Zaragoza capital e incluso Arnedo (La Rioja), población esta última donde se sustrajo herramienta de jardinería.
La investigación continúa abierta para determinar la procedencia del resto de material intervenido. Se encuentra depositado en el Cuartel de la Guardia Civil de Casablanca donde se realizarán los reconocimientos de los efectos por parte de aquellas personas que hayan sido víctimas de este tipo de ilícitos.