Opinión

La grandeza de ser mujer

Hace unos días visité Kenia, representando a España de la mano de INNETICA, Red europea de organizaciones públicas y privadas de la que tengo el honor de ser su Secretario General.

Unos meses atrás nos comunicaron que la propia Comisión Europea había aprobado un proyecto internacional en el que participamos, junto con otros 10 países de todo el mundo.

En Nairobi asistimos a una actividad formativa sobre un tema muy importante, diría que vital, biológico, recurrente, muchas veces incomprendido, mal comprendido, vilipendiado por algunos/muchos hombres si bien para quien esto suscribe, para otros muchos hombres y para todas las mujeres es algo completamente normal.

Me refiero, como seguro habrán adivinado, a la Menstruación. Pensaba que la problemática del Período se circunscribía a Países del denominado Tercer Mundo, donde las condiciones higiénico-sanitarias, histórico-sociales, hacían de esta actividad fisiológica del cuerpo femenino algo mal visto e impuro. Recordemos lo que parecía del Pasado, lo reflejado en el Antiguo Testamento en varios de los Libros que conforman el Sagrado Texto; me refiero a aquellas menciones sobre la impureza de la Mujer al tener el Período (Levítico, Ezequiel, …). ¿Pasado? Pues, no; desgraciadamente, es bien actual.

Durante el curso, los diferentes participantes compartimos los “otros” nombres de la Menstruación: regla, bandera japonesa (si piensan en el círculo rojo, entenderán la razón de la denominación), lluvia, luna, alfombra roja, … y otra serie de curiosos nombres. Curiosos, y sustitutivos para no mencionar el término correcto que es, sigue siendo en pleno Siglo XXI, tabú. Al igual que en los anuncios de productos de higiene femenina, en los que la sangre no es roja sino azul, la simple mención de la Regla produce azoro en muchas personas menstruantes (no solo las mujeres tienen la Menstruación). Y, no solo eso, algo fisiológico que se conceptúa por muchos gobiernos (el español hasta la fecha) casi como un lujo. Me refiero al IVA de los productos de higiene íntima. Por el contrario, el gobierno irlandés rompió una lanza y allí están exentos de impuestos. Por cierto, por si les sale en el Trivial Pursuit, en Hungría (hasta donde yo conozco) están gravados con el 27%, ahí es nada…

Hemos de acabar con esta situación; menstruar no es malo (si no se menstruara, nadie de nosotros estaríamos aquí), ni pecaminoso, ni vergonzante, ni impuro. Las mujeres lo padecen con resignación (sufriendo incomodidad, molestias, dolores e incomprensión). No lo hagamos más complicado todavía.

La próxima acción formativa dentro del proyecto será en abril del próximo año en la India, un país donde, aun a pesar de todo lo dicho, las mujeres mayores ofrecen una fiesta a las niñas en su menarquia (la primera Menstruación). Y allí estará INNETICA, aprendiendo y colaborando, para intentar mejorar con nuestro granito de arena la Sociedad.

Y, seamos empáticos. No les quitaremos el dolor, pero un gesto de cariño, hace mucho.