El grupo municipal de Zaragoza en Común (Zec) en el Ayuntamiento de Zaragoza ha solicitado al equipo de PP-Cs la puesta en marcha de las 26 viviendas de alquiler municipal ubicadas en la antigua Imprenta Blasco en el centro de Zaragoza, una rehabilitación que impulsó el gobierno de Santisteve durante la anterior corporación. El destino de esos inmuebles, el grupo municipal ha propuesto que estén dirigidas a “aquellas personas que forman parte de las distintas listas de espera de acceso a una vivienda, familias y perfiles con una necesidad habitacional urgente, familias monomarentales, jóvenes y rentas más bajas”.
Para el portavoz de la Zaragoza en Común, Pedro Santisteve, “es fundamental y más con la pandemia que haya una alternativa habitacional para prevenir los contagios”. La promoción de estas viviendas como parque público de la ciudad, es para Santisteve, “una demanda de Europa al ser España uno de los países con menos número de vivienda pública, un 2,5% del total”. El portavoz también ha pedido al Gobierno municipal una mayor intervención en vivienda que regule su acceso, debido a un “incremento del precio”.
El portavoz de Zec ha afirmado que el acceso a vivienda en la ciudad de Zaragoza tiene una lista de espera de unas 7.000 personas, en comparación con las 1.000 personas que dicen desde el Ayuntamiento ya que “hay gente que solo les falta un papelito”. La salida de esta crisis “no puede volver a ser a base de especular con un Derecho Humano como es el derecho a una vivienda digna” y por eso “debemos poner todos los recursos públicos y herramientas necesarias al servicio de ese fin”.
Santisteve también ha mostrado su negativa al traslado, que ha ocurrido hoy, a otras partidas de un millón de euros destinados a rehabilitación vivienda coeficiencia. Lo que ha sentenciado como “un abandono de lo público” por parte del equipo de Gobierno municipal.
“Un trato inhumano”
El ex alcalde ha hecho referencia al desalojo que tuvo lugar ayer en el hotel San Valero para expresar la urgencia de vivienda de la ciudad y como se agrava con “los continuos desahucios”. Ha aprovechado para criticar que estas personas que las personas expulsadas ayer “no tienen alternativa habitacional” y que la única administración que acudió ayer “fue la policía”.
“Que nadie de servicios sociales del Gobierno de Aragón o del Ayuntamiento se acercarse a hablar con ellos nos parece gravísimo, un trato inhumano, descarnado e insensible”, ha sentenciado Santisteve. También se ha preguntado si “la ley o la Constitución les ampara”.
