Zaragoza ya se prepara para que la tradicional Cabalgata de Reyes vuelva a las calles el 5 de enero. Pero antes, los carruajes que utilizan Melchor, Gaspar y Baltasar permanecerán aparcados junto a la Fuente de la Hispanidad, en la plaza del Pilar, para su exposición.
La vicealcaldesa de Zaragoza, Sara Fernández, ha destacado que los más pequeños podrán disfrutar de los tronos, subirse a ellos y comprobar in situ de toda la magia del medio de transporte que utilizan sus majestades para traer los regalos. Frente a las carrozas estará el gran buzón real, para que las familias envíen sus cartas, convirtiéndose en el corazón de la Navidad.
“Disfrutar de la cultura de la ciudad en familia es uno de los mejores regalos que podemos hacer y podemos recibir. La plaza del Pilar se convierte en la plaza de la Navidad y va ser posible transportarse a Judea, Oriente, Laponia y al país de la magia navideña sin salir de este emblemático espacio”, ha subrayado Fernández durante la llegada de los carruajes a esta zona de la plaza del Pilar.
A escasos metros de las carrozas, y siguiendo este recorrido por la Región de Oriente, estará el Belén de Judea a tamaño natural, que un año más volverá a ser visitable y abrirá sus puertas este sábado, 4 de diciembre, a las 18.00 horas. A diferencia de las navidades pasadas, no habrá que pedir cita previa si la situación sanitaria lo permite.
Un Nacimiento que este año cambia su aspecto con un nuevo diseño estructural. La planta ha cambiado su forma tradicional rectangular por una forma de manto. De este modo, el Belén está alineado visualmente con el conjunto escultural de la fachada principal de la Basílica del Pilar diseñado por Pablo Serrano, de manera que, junto a los juegos de iluminación, el Belén ganará en espectacularidad a la instalación.