El Ayuntamiento da luz verde a su propio Tribunal de Contratos con el voto en contra del PSOE

Pleno del Ayuntamiento de Zaragoza
photo_camera El reglamento del Tribunal de Contratos ha salido adelante con el apoyo de PP, Cs, Vox, Podemos y la abstención de ZeC. El PSOE ha votado en contra

El Pleno del Ayuntamiento de Zaragoza ha dado luz verde este miércoles a la creación de un Tribunal de Contratos municipal. Este organismo tendrá como función resolver los recursos de empresas y particulares a los procesos de contratación pública del Consistorio. El Partido Socialista ha sido el único partido que ha votado en contra y ha recordado que en este momento está en trámite en las Cortes una nueva ley autonómica que puede afectar a sus funciones.

Después de años de trámites y litigios entre la DGA y el Ayuntamiento, el Pleno ha aprobado finalmente el reglamento de este organismo. La propuesta ha salido adelante con el apoyo de todos los partidos y la abstención de Zaragoza en Común. El PSOE lo ha rechazado.

La concejal socialista, Ros Cihuelo, ha explicado que están a favor de que Zaragoza tenga un tribunal de contratos propio, pero considera que es necesario esperar a que se aclare si las competencias del tribunal serán exclusivas o tendrá que compartir algunas con el Tribunal Administrativo de Contratos Públicos de Aragón (Tacpa). “Vamos a esperar por un principio de prudencia a que se termine de regular la normativa que aclare las dudas de todos los ciudadanos”, ha subrayado.

Por su parte, la consejera de Hacienda, María Navarro, ha lamentado que el PSOE finalmente se haya descolgado de esta propuesta. “Aquí estamos para defender a Zaragoza y a la autonomía municipal y no puede ser que nos estén constantemente amenazando”, ha sostenido y ha pedido al Grupo Municipal Socialista que diga a sus compañeros del Gobierno de Aragón “que a este tribunal no le vuelvan a recurrir ni alegar, y que por fin haya paz”.

Todo ello en un Pleno en el que Podemos ha pedido que se destine parte de los 27 millones de euros del remanente de tesorería a ayudas contra la inflación y en el que también se ha aprobado la regulación de las dark kitchen o cocinas fantasma para evitar que proliferen sin control este tipo de negocios en las zonas residenciales y se conviertan en un problema de ruidos, olores y otras afecciones.