Los primeros actos de vandalismo llegan a la recién renovada plaza Salamero

Grafiti plaza Salamero
photo_camera Una de las entradas al parking ha sido vandalizada con un grafiti

No han pasado ni dos semanas desde la inauguración de la renovada plaza Salamero. Sin embargo, se podría decir que este céntrico enclave de la capital aragonesa se estrenó de la mejor forma posible con la presencia de las cofradías y sus pasos durante la Semana Santa zaragozana. El estreno de su mobiliario, por el contrario, no ha tenido la misma suerte. Y es que, en tan poco tiempo, ya han vandalizado algunas de sus paredes.

Esta misma semana la plaza amanecía con un grafiti en el que podía leerse “Ce n'est pas un place”, traducido del francés, “esto no es un lugar”, haciendo posiblemente referencia al artista René Magritte. Poco tiempo después, algunos operarios procedían a la limpieza y retirado del mismo. Todo ello con los materiales propios para intentar dejar el menor rastro posible.

En este caso, la pintada se había realizado en uno de los inmuebles pertenecientes a las entradas y salidas del parking de la propia plaza. Pese a ello, hay que recordar que el Ayuntamiento de Zaragoza gasta cada año cerca de tres millones de euros a retirar pintadas, reponer contenedores quemados y mobiliario urbano roto o a limpiar excrementos de perros sin recoger.