Piscinas en las campas de esparcimiento y ventiladores que pulverizan agua. Así es como protegen a los animales de acogida que se encuentran en el Centro Municipal de Protección Animal (CMPA) de Zaragoza a la espera de encontrar un nuevo hogar durante los episodios de olas de calor. Este centro ha intensificado en verano las medidas para cuidar a los animales ante las fuertes temperaturas que afectan a la ciudad. Las consecuencias de las olas de calor afectan también a las mascotas, llegando a provocar graves daños en su salud si no se no toman las precauciones adecuadas.
De esta forma, se ha adelantado el horario de salidas a las zonas de esparcimiento coincidiendo con las horas de menos calor y se han colocado en las campas pequeñas piscinas para que las mascotas puedan refrescarse, al tiempo que juegan y se entretienen con el agua.
Para refrescar el ambiente de las naves donde se alojan, este año se han comprado unos ventiladores con nebulización de agua. Además, diariamente se limpian y se rocían con agua los habitáculos donde viven los perros, lo que contribuye también a refrescar y bajar la temperatura. La zona interior dispone de sombra permanente y se encuentra bien aislada, por lo que las fuertes temperaturas del exterior nunca llegan a ser peligrosas para los animales, según apuntan desde la Oficina de Protección Animal.
Del mismo modo, los perros y gatos disponen de agua fresca durante todo el año, al margen de las olas de calor, ya que disponen de bebedores automáticos que proporcionan agua conforme van bebiendo, lo que permite que se renueve de manera constante.
Por otro lado, el espacio donde se alojan los gatos, más pequeño que las naves de los perros, tienen climatización constante las 24 horas del día, lo que les permite salir al exterior siempre que quieran por las gateras.