Zaragoza reorganiza el servicio de parques y jardines para mejorar las zonas verdes de la ciudad

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La nueva estrategia y modelo de gestión de la Infraestructura Verde de Zaragoza apuesta por una gestión integrada que ponga al servicio de la ciudadanía la riqueza natural que ofrece la ciudad. Así lo ha destacado, la consejera de Servicios Públicos y Movilidad, Natalia Chueca, que ha presentado hoy en la Comisión de Pleno del área las principales líneas de la reorganización del servicio.

“Se trata -ha explicado Natalia Chueca- de cambiar la visión de los parques y jardines como sistemas aislados y entenderlos como un conjunto interconectado, como una red cuyas dinámicas están potenciadas por la biodiversidad”.

Esta gestión pretende realizarse, además, en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Organización de Naciones Unidas, y en concreto haciendo hincapié en aspectos como la salud y el bienestar de la ciudadanía; la creación de ciudades y comunidades sostenibles; la acción por el clima; y la atención a la vida de los ecosistemas terrestres.

“La gestión de la Infraestructura Verde -ha enfatizado la consejera- es estratégica para la salud y el bienestar de los ciudadanos. Si es importante condiciones normales, en las actuales circunstancias es clave y esencial, por lo que este Gobierno la va a cuidar, mejorar y potenciar”.

En este sentido, hay que recordar que, desde el pasado mes de marzo, el Servicio de Parques y Jardines incorpora a su estructura la Unidad de Conservación del Medio Natural, que hasta ahora pertenecía a Medio Ambiente. Otro elemento a tener en cuenta es la gestión del Parque del Agua, una gran extensión verde en la que también confluyen naturaleza “urbana” y “periurbana” y que también forma parte de la estructura de este servicio, cuya denominación ha pasado a ser Parques, Jardines e Infraestructuras Verdes.

Un patrimonio que rebasa los límites de la ciudad

Zaragoza cuenta actualmente con casi 50 millones de metros cuadrados de espacios verdes municipales, (69,07 metros cuadrados por habitante); 90 parques urbanos; más de 166.000 árboles, de los que 120.000 están en el viario urbano y el resto en parques; 181 fuentes ornamentales; 639 fuentes para beber, 383 áreas de juegos infantiles…

Este patrimonio, a menudo no suficientemente valorado, se ha visto, en palabras de la consejera, “eclipsado por una gestión en la que han primado más los conflictos laborales que el propio servicio público. Podríamos decir, casi mejor que nunca, que los árboles no nos han dejado ver el bosque. Y ese ‘bosque’ -ha añadido- es un patrimonio enorme, muy repartido por toda la ciudad, que queremos que sirva para el disfrute, la salud y la calidad de vida de los zaragozanos”.

Entre los objetivos que marcan esta nueva estrategia figura naturalizar los espacios verdes urbanos, para transformarlos y gestionarlos favoreciendo los procesos naturales, la entrada espontánea de flora y fauna y potenciar la generación de servicios ecosistémicos”, es decir, “bienestar, ocio, mejora de salud, cohesión social o cultural.

Para ello es necesario “optimizar la gestión”, para lo cual se ha comenzado por reestructurar el Servicio en una gestión integral que reforzará sinergias, incorporará el uso de las nuevas tecnologías e implantará un nuevo sistema de control de la calidad de los servicios prestados.

La mejora de esta estructura organizativa, que ya está en pleno desarrollo, mejorará la especialización en las acciones a realizar y sus resultados; optimizará la gestión económica de los recursos; y mejorará, en suma, la calidad general de la Infraestructura Verde.

La renovación del paisaje urbano, con mayor protagonismo al arbolado y a las composiciones vegetales (flores, paisajismo, mejoras en las áreas de juegos infantiles, mejora en la señalética…); la implementación de soluciones basadas en la naturaleza, desde el punto de vista fisiológico y fitopatológico; una gestión y un tratamiento en consonancia con la propia biodiversidad de Zaragoza y su entorno; la dinamización de los parques, con propuestas culturales y de ocio, etcétera, son los ejes alrededor de los cuales gira este nuevo planteamiento.

En su intervención, Natalia Chueca ha detallado esa nueva estructura funcional del Servicio, determinante para conseguir todos estos objetivos, que incluirá seis bloques principales: Jefatura, Proyectos y Obras, Control de Calidad e Instalaciones, Gestión de Espacios Verdes, Gestión del Arbolado y Naturalización y Biodiversidad

Dentro de la Gestión de Espacios Verdes se encontrarán, a su vez, tres elementos: Conservación de Parques Urbanos, Conservación de Paseos Arbolados y Parque del Agua, Conservación del Sector Reservado.

Esta organización del Servicio de Parques, Jardines e Infraestructuras Verdes, con la que se reforzará la gestión de las zonas verdes en general y del arbolado en particular, llevará, en consecuencia, a una redistribución de los lotes por campos especializados y a la optimización de recursos.

Está previsto, así, que el trabajo se reparta con este planteamiento: Arreglos de obra civil e instalaciones, Fuentes e hidráulica: fuentes y estanques ornamentales, hidráulica en alta, hidráulica del Parque del Agua.

Conservación del Sector 1, con Sector 1.1, Parques Urbanos: Conservación integral y limpieza del actual Sector 1, con la excepción de los paseos arbolados principales, rondas y barrios rurales.

Sector 1.2, con Paseos Arbolados y Parque del Agua: Conservación integral y limpieza de paseos y plazas arbolados principales, barrios rurales y Parque del Agua. Conservación del Sector 2 (reservado): Conservación integral y limpieza del Parque Tío Jorge y su entorno.

Sector 3, Riberas y Espacios Naturales: Conservación integral y limpieza de bosques de riberas del ámbito urbano de los ríos Ebro, Gállego y Huerva, así como el Canal Imperial y espacios naturales municipales.