ZeC lamenta que la nueva ordenanza sobre el botellón esconda un carácter “represivo y sancionador”

Santisteve ha recordado la existencia del Plan Joven, elaborado por su equipo de gobierno
photo_camera Santisteve ha recordado la existencia del Plan Joven, elaborado por su equipo de gobierno

El grupo municipal de Zaragoza en Común ha cuestionado este viernes la nueva ordenanza contra el botellón impulsada por el Ayuntamiento, al creer que esconde un carácter “represivo y sancionador” contra los jóvenes, enmascarado en la aparente pretensión de favorecer unos hábitos de vida saludables. Además, ha señalado que su periodo de vigencia debe estar vinculado a la pandemia, un máximo de doce meses prorrogables por periodos de seis.

Muestra de ello son las multas económicas a las que se tendrán que enfrentar los jóvenes, cuyo importe mínimo es de 150 euros, si bien existen otras alternativas para saldar la sanción. Por ello, ZeC propone que ese mínimo se rebaje a 50 euros. “Las sanciones nos parecen un tanto desproporcionadas, el hecho de que los chavales hagan botellón tiene mucho que ver con la imposibilidad por parte de los jóvenes de consumir este tipo de bebidas en establecimientos comerciales”, ha opinado el portavoz de la formación, Pedro Santisteve.

“Si verdaderamente pretendemos potenciar hábitos de vida saludables o una alternativa al ocio juvenil, deberían haberse impulsado medidas de refuerzo”, ha continuado Santisteve. En este sentido, ha recordado la existencia del Plan Joven elaborado por su equipo de gobierno en la legislatura anterior, que engloba cerca de 1.200 medidas propuestas por unos 500 jóvenes.

“De todo esto no se ha oído hablar nada en quince meses, tenemos un servicio de Juventud prácticamente desmantelado, con gente a punto de jubilarse y sin gente joven que haya entrado nueva”, ha lamentado el portavoz. “Esta ordenanza viene en un momento en el que la cultura se han restringido mas allá de lo que podía ser consecuencia de la pandemia, con unas actividades que permitían a los jóvenes hacer frente a los problemas del confinamiento y a la ausencia de ocio alternativo”, ha añadido.

“Nos preocupa que esta ordenanza no vaya precisamente hacia aquello que dice, la búsqueda de hábitos de vida saludable o una alternativa al ocio juvenil, porque entonces lo lógico sería que viniera acompañado de medidas de refuerzo”, ha reiterado Santisteve, apuntando su deseo de “dar la palabra a los jóvenes para buscar vías que confronten con la manera en la que el ocio esta sociedad está girando excesivamente hacia el alcohol”.