Después del parón del confinamiento, los 180 aspirantes a integrar el Cuerpo de Bomberos de Zaragoza se enfrentan este martes a la primera de las tres pruebas que faltan para completar el proceso de selección que fue suspendido en marzo por la crisis sanitaria. En total, hay 62 nuevas vacantes que supondrán una “inyección importante”, en un momento en el que las situaciones de emergencia aumentan debido a la pandemia, según ha explicado el concejal de Personal, Alfonso Mendoza. Además, se terminará así un proceso de selección que comenzó el pasado noviembre con 646 inscritos, de los que quedan 180, cuatro de ellos mujeres, y que reforzará la plantilla ante posibles bajas por coronavirus.
La primera prueba se celebra en el Parque 1 de Bomberos, y en ella los aspirantes deben demostrar que pueden trabajar a cierta altura sin vértigo. El 17 de septiembre, y en la misma ubicación, tendrá lugar la siguiente. En esta ocasión, se comprobará la habilidad para trabajar sin claustrofobia en espacios cerrados y a oscuras. Por último, la tercera prueba, que consiste en un test psicotécnico, se celebrará también en septiembre en una fecha todavía por concretar. Todas ellas se realizarán con todas las medidas de seguridad para evitar la propagación del virus, por lo que se convocará a los opositores en grupos más reducidos, de diez en diez, para evitar aglomeraciones. Esto “puede provocar que algunas pruebas, especialmente la segunda por su complejidad, se alarguen durante varias jornadas”, ha afirmado Mendoza.
Una vez terminadas las pruebas, los 62 nuevos efectivos que hayan superado con éxito la oposición deberán cursar una formación de 240 horas. Las cien primeras horas son comunes para todos los bomberos de Aragón, mientras que las restantes son específicas de cada provincia. Esta formación se impartirá a lo largo de dos meses y medio, pero, dada la crisis sanitaria “se plantea la posibilidad de hacerla intensiva para acortar tiempos en caso de que fuera necesario reforzar la plantilla ante posibles bajas por la Covid-19”, ha explicado el concejal. También, debido a la situación excepcional, “se podría contar con los bomberos en prácticas para desarrollar tareas para las que estén capacitados, aunque no hayan terminado la formación”.
Protocolos de seguridad
Por su parte, el concejal delegado de Bomberos se ha mostrado “muy satisfecho” por los protocolos de seguridad implantados en el cuerpo que, entre otras medidas, incluye la organización por turnos estancos, compuestos siempre por los mismos agentes. Además, ha explicado que “se intenta que, en las intervenciones, sólo actúen bomberos de un mismo parque siempre que sea posible, evitando la interacción entre el resto”.
Actualmente hay un caso confirmado por la Covid-19 en la plantilla y tres efectivos en cuarentena por contacto estrecho. Desde junio, doce agentes, de un total de 400, han padecido esta enfermedad. El pico se alcanzó este verano “con cinco bomberos infectados a la vez, lo que no afectó en ningún momento a la prestación de este servicio público”, enfatizó Mendoza, añadiendo que Bomberos de Zaragoza es un “ejemplo” de actuación en esta crisis. Asimismo, el edil ha resaltado la gran labor que han realizado los voluntarios de Protección Civil durante la pandemia.
