Celebrar una fiesta infantil en un parque de bolas parece cosa del pasado. La pandemia ha provocado que en Zaragoza unos 40 centros de ocio infantil se hayan quedado fuera de cualquier normalidad y sin una fecha prevista para volver a abrir.
Para tratar de revertir esta situación de “indefensión” ha nacido la Asociación de Parques Infantiles y Salas de Ocio de Aragón (Apisoa), que ya ha enviado un escrito a la consejería de Sanidad del Gobierno de Aragón reclamando su reapertura, pero siguen sin recibir contestación.
El vicepresidente de Apisoa y propietario de Área de Fiesta en Zaragoza, Fernando Gómez, junto a otros empresarios del sector, han reclamado al Gobierno de Aragón medidas de seguridad concretas para reabrir e intentar salir de esta “situación límite” en la que se encuentran.
Gómez ha insistido en que acudir a un centro de ocio infantil es igual de seguro que acudir a un restaurante siempre y cuando uno tome todas las medidas. “Nosotros estamos poniendo encima de la mesa todas las medidas para que nuestros locales se puedan abrir con total seguridad”, ha aseverado.
En concreto piden que se les indiquen condiciones higiénico-sanitarias y relativas a aforos y limitaciones para el sector a través de las disposiciones sanitarias dictadas por la Consejería de Sanidad para los distintos niveles de alarma, o bien, la aplicación por analogía de las medidas ya reguladas para otras actividades como la restauración, hostelería, centros de ocio juvenil y centros recreativos y similares.
Gómez ha apuntado que el ocio infantil es el “gran olvidado” de esta pandemia y ha lamentado que algunos de estos centros ya han tenido que cerrar definitivamente sus persianas al no poder hacer frente a los gastos de mantenimiento sin ningún tipo de ingresos.
Desde Apisoa ya han tenido reuniones con los grupos parlamentarios de las Cortes de Aragón de Podemos y Chunta Aragonesista, que se han comprometido a estudiar su situación.
